·
Evocación:
Se emplean recuerdos, sueños para interrumpir
la narración cronológica.
''Caes en ese sopor, caes hasta el fondo de ese sueño que
es tu única salida, tu única negativa a la locura. "Esta loca, esta
loca", te repites para adormecerte, repitiendo con las palabras la imagen
de la anciana que en el aire despellejaba al cabrio de aire con su cuchillo de
aire: ". . .esta loca. . .", en el fondo del abismo oscuro, en tu
sueño silencioso, de bocas abiertas, en silencio, la veras avanzar hacia ti,
desde el fondo negro del abismo, la veras avanzar a gatas.
En silencio, moviendo su mano descarnada, avanzando hacia
ti hasta que su rostro se pegue al tuyo y veas esas encías sangrantes de la
vieja, esas encías sin dientes y grites y ella vuelva a alejarse, moviendo su
mano, sembrando a lo largo del abismo los dientes amarillos que va sacando del
delantal manchado de sangre
tu grito es el eco del grito de Aura, delante de ti en el
sueño, Aura que grita porque unas manos han rasgado por la mitad su falda de
tafeta verde, y esa cabeza tonsurada, con los pliegues rotos de la falda entre
las manos, se voltea hacia ti y ríe en silencio, con los dientes de la vieja
superpuestos a los suyos, mientras las piernas de Aura, sus piernas desnudas,
caen rotas y vuelan hacia el abismo. . ''.
·
Suspenso:
Esta técnica se emplea al final de la historia, a quien
le ofrece un final abierto para seguirlo.
''...Veras, en la tercera foto, a Aura
en compañía del viejo, ahora vestido de paisano, sentados ambos en
una banca, en un jardín. La foto se ha borrado un poco: Aura no se vera tan
joven como en la primera fotografía, pero es ella, es el, es . . . eres tu.''
·
Engarzamiento:
Son pequeñas historias que aparentemente no tienen nada
que ver con la historia principal. Sin embargo van a continuar hacia el mismo
lugar.
'' No me detengas —dijo—; voy hacia mi juventud, mi
juventud viene hacia mi. Entra ya, esta en el jardín, ya llega' . . . Consuelo,
pobre Consuelo. . . Consuelo, también el demonio fue un ángel, antes..."
contra el monstruo republicano, ve en el general Boulanger un rayo de esperanza,
suspira por México, siente que en el caso Dreyfus el honor —siempre el honor—
del ejercito ha vuelto a imponerse. . . Las hojas amarillas se quiebran bajo tu
tacto; ya no las respetas, ya solo buscas la nueva aparición de la mujer de
ojos verdes: "Se porque lloras a veces, Consuelo. No te he podido dar
hijos, a ti, que irradias la vida. . ." Y después: "Consuelo, no
tientes a Dios. Debemos conformarnos. ,;No te basta mi cariño? Yo se que me
amas; lo siento. No te pido conformidad, porque ello sería ofenderte. Te pido,
tan solo, que veas en ese gran amor que dices tenerme algo suficiente, algo que
pueda llenarnos a los dos sin necesidad de recurrir a la imaginación enfermiza.
. ." Y en otra página: "Le advertí a Consuelo que esos brebajes no
sirven para nada. Ella insiste en cultivar sus propias plantas en el jardín.
Dice que no se engaña. Las hierbas no la fertilizaran en el cuerpo, pero si en
el alma..." Mas tarde: "La encontré delirante, abrazada a la
almohada. Gritaba: 'Si, si, si, he podido: la he encarnado; puedo convocarla,
puedo darle vida con mi vida'. Tuve que llamar al médico. Me dijo que no podría
calmarla, precisamente porque ella estaba bajo el efecto de narcóticos, no de
excitantes. . ."
Estrategias de presentación:
Es como presenta a los personajes; puede dialogar
directamente o un interlocutor manifiesta sus diálogos. A la manera directa se
le llama némesis o representación.
·
Némesis:
—Aura...
Repetirás: —Aura. . .:
—Aura. . .:
—No... no me toques. . . Acuéstate a mi lado. . .
—Ella puede regresar en cualquier momento. . .
—Ella ya no regresara.
—¿Nunca?
—Estoy agotada. Ella ya se agoto. Nunca he podido
mantenerla a mi lado mas de tres días.
—Aura. . '.
—No... No me toques. . .
—Aura. . . te amo
—Si, me amas. Me amaras siempre, dijiste ayer. ..
—Te amare siempre. No puedo vivir sin tus besos, sin tu
cuerpo.
—Bésame el rostro; solo el rostro.
—Volverá, Felipe, la traeremos juntos. Deja que recupere
fuerzas y la haré regresar.
Y la manera indirecta diéresis o narración.
·
Diéresis:
En la tercera foto, a Aura en compañia del viejo, ahora
vestido de paisano, sentados ambos en una banca, en un jardín. La foto se ha
borrado un poco: Aura no se vera tan joven como en la primera fotografía, pero
es ella, es el, es . . . eres tu.
Pegas esas fotografías a tus ojos, las levantas hacia el
tragaluz: tapas con una mano la barba blanca del general Llorente, lo imaginas
con el pelo negro y siempre te encuentras, borrado, perdido, olvidado, pero tu,
tu, tu.
Puntos de historia
·
Acción:
Es toda manifestación realizada por el personaje. Esta
puede actuar en forma pasiva o activa.
Pasiva: Apenas pruebas el café negro y frío que te
espera en el comedor. Permaneces una hora sentado en la vieja y alta silla
ojival, fumando, esperando los ruidos que nunca llegan, hasta tener la
seguridad de que la anciana ha salido de la casa...
Activa: hasta tener la seguridad de que la anciana
ha salido de la casa y no podrá sorprenderte. Porque en el puño, apretada,
tienes desde hace una hora la Llave del arcón y ahora te diriges, sin hacer
ruido, a la sala, al vestíbulo donde esperas quince minutos mas —tu reloj te lo
dirá— con el oído pegado a la puerta de doña Consuelo, la puerta que en seguida
empujas levemente, hasta distinguir, detrás de la red de araña de esas luces
devotas, la cama vacía, revuelta, sobre la que la coneja roe sus zanahorias crudas:
la cama siempre rociada de migajas que ahora tocas, como si creyeras que la
pequeñísima anciana pudiese estar escondida entre los pliegues de las sabanas.
Caminas hasta el baúl colocado en el rincón; pisas la
cola de una de esas ratas que chilla, se escapa de la opresión de tu suela,
corre a dar aviso a las demás ratas cuando tu mano acerca la llave de cobre a
la chapa pesada, enmohecida, que rechina cuando introduces la llave, apartas el
candado, levantas la tapa y escuchas el ruido de los goznes enmohecidos.
Sustraes el tercer folio —cinta roja— de las memorias y al levantarlo
encuentras esas fotografías viejas, duras, comidas de los bordes, que también
tomas, sin verlas, apretando todo el tesoro contra tu pecho, huyendo
sigilosamente, sin cerrar siquiera el baúl, olvidando el hambre de las ratas,
para traspasar el umbral, cerrar la puerta, recargarte contra la pared del vestíbulo,
respirar normalmente, subir a tu cuarto.
Allí leerás los nuevos papeles...
·
Funciones:
Son las unidades mínimas en las cuales puede dividirse el
retrato, independientemente de que la novela tenga divisiones por capítulos o
no, las funciones agrupan varios tiempos determinados y suelen nombrarse con
una sola palabra. Ejemplo: Infancia, secuestro o fuga.
Te dices que tú puedes mejorar considerablemente el
estilo, apretar esa narración difusa de los hechos pasados: la infancia en una
hacienda oaxaqueña del siglo XIX, los estudios militares en Francia, la amistad
con el Duque de Morny, con el circulo intimo de Napoleón III, el regreso a México
en el estado mayor de Maximiliano, las ceremonias y veladas del Imperio, las
batallas, el derrumbe, el Cerro de las Campanas, el exilio en París. Nada
que no hayan contado otros.
·
Personajes
Es quien participa en las acciones, este puede ser una
persona, animal o cosa; de igual manera puede ser un elemento real o
fantástico.
Aura: Su figura es fantasmagórica, aparece y desaparece
sin que sea percibida, habla poco, tiene mirada vacía, casi siempre está en la
cocina.
Felipe: Es víctima del destino porque su trabajo consiste
en completar memorias del general.
Consuelo: Necesita un descanso y alivio de pena por no
haber podido engendrar un hijo con su esposo, por esta razón se volvió hechicera.
·
Esferas de acción:
Es la que envuelve al
personaje.El personaje principal es un joven historiador, rodeado de papeles amarillentos, cargado de información desempeña sus conocimientos en un escritorio de su habitación. Lee y reescribe lo que lee. Es de los hombres que usa traje todo el día con zapatos lustrados y un reloj.
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